martes, agosto 22, 2006

El nuevo muro de Berlin o como se aisla mi vecino

Mi vecino es un neurotico. Bueno, llamarle neurotico es decir que todos los neuroticos del mundo son capaces de correr felices por una amplia llanura con una camiseta en la que haya estampada una diana. En un dia soleado. En plena temporada de caza. Y ademas graznando.
Este hombre ha conseguido hacer de su enfermedad un arte: la valla que crece cada semana está empezando a combarse, para que el ojo lo transforme en recta, cual columna griega. Y hablando de grecia, debe amar sin fin esta cultura tan hermosa, pues puebla su jardin una variopinta coleccion de esculturas y otros "objetos de arte" en escayola envejecida, que mas parece una visita a la coleccion privada de Tim Burton que un idilico jardin.
Y no solo la cultura helena debe amar este señor, pues imitando a nuestra cercana ciudad de italica, adorna su puerta un sobrio "Quivi Canen", cuidado con el perro. El perro es uno de esos lanudos media patada que lo unico que saben hacer es correr y ladrar hasta al viento mas liviano... En fin, al decir cuidado con el perro, debe significar cuidado que no lo piseis.
Por último, otras hermosas placas anuncian que en su patio hay mas camaras que en un pelicula de Spilberg, que la alarma de un banco hace menos ruido que la suya y que en la piscina cria cocodrilos mutantes asesinos.
En fin, creo que seria mejor, mas que cuidado con el perro, poner sobre la puerta: Cuidado, dueño imbecil. Al final todos lo entenderiamos mucho mejor.